Talleres

Para nosotros, el primer lugar en donde surge la comprensión espiritual es en la propia experiencia. Si bien muchas veces estas experiencias pueden ocurrir de manera espontánea, en el Laboratorio compartimos prácticas para la mente, el cuerpo y el alma que disponen a los participantes para expandir su percepción de sí mismos y su relación con los demás y su entorno, con el objetivo de ahondar en la exploración interior y el conocimiento espiritual.

Durante diez meses, realizamos siete talleres en forma de retiros residenciales en la naturaleza. Cada uno se basa en uno de los tipos de experiencia espiritual que escogimos para la exploración artística y la reflexión.

Desde una perspectiva pluralista y no confesional, que toma elementos de diferentes tradiciones y prácticas espirituales, la metodología de los talleres se basa en:

Prácticas internas, enfocadas en expandir la capacidad de escucha espiritual, la intuición y la visión, para fomentar la intimidad con lo divino, el autoconocimiento y la transformación personal.
Prácticas externas, que centran la atención en el cuerpo y en la naturaleza a través de la observación activa y la interacción con los demás y el entorno. Estas prácticas invitan a la presencia plena y a restaurar la capacidad de asombro ante lo cotidiano para percibir una forma de vida llena de significado y conexión.
Lectura contemplativa de textos de diferentes culturas y tradiciones religiosas que nutren la inspiración y la imaginación.
Círculos de pensamiento que generan espacios de reflexión y diálogo filosófico, orientados a la exploración conceptual de los temas planteados, a la consideración de diferentes perspectivas y a la búsqueda de una comprensión más rica y profunda.
Escritura reflexiva para ahondar en la búsqueda personal y registrar el proceso de indagación en los diarios.
Exploración artística individual a partir de la experiencia espiritual cultivada en los talleres y los temas propuestos para la indagación.
Exploración artística colectiva, en la cual, mediante la articulación de diferentes lenguajes, se fomenta la cooperación en la comunidad de artistas, se descubren nuevas posibilidades de trabajo y se contribuye a la integración de las experiencias de cada taller.
Espacios para la presentación de los bocetos y obras creados durante los talleres, en los cuales los participantes comparten sus procesos creativos y espirituales.